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En la noche de los muertos vivientes muchas personas se divierten disfrazándose como los personajes de las películas de miedo o relacionados con el terror. Para que vosotras también podáis contar con un maquillaje acorde a la ocasión, hemos hablado con la maquilladora y fotógrafa profesional Silvia Quirós, que nos ha enseñado a realizar un maquillaje de zombie para Halloween paso a paso. ¿Queréis ver cómo?
Tono pálido
Partimos con la cara lavada e hidratada de la manera habitual y comenzamos a aplicar una base de maquillaje blanquecina con una esponjilla húmeda. Lo hacemos mediante pequeños toques para conseguir un efecto a manchas. A continuación difuminamos el maquillaje con la parte que no hemos usado del mismo instrumento.
Para sellar la base, utilizamos unos polvos sueltos de color gris bien esparcidos por todo el rostro. De esta manera lograremos ese aspecto demacrado propio de los muertos. Con los mismos polvos incidiremos en las mejillas y la frente para oscurecerlos más.
Simulamos golpes y heridas
Utilizaremos un colorete o sombra de ojos en tono morado alrededor de uno de los ojos y por un lado de la frente. Así,simularemos golpes. Por otro lado, emplearemos un color rojo sobre el otro ojo, para crear un aspecto enfermo, y alrededor de la nariz y la boca, con un efecto sangriento. Seguidamente, usaremos un morado más oscuro y maquillaremos el centro de los moratones de la frente y del ojo, donde también marcaremos el lagrimal. Un marrón oscuro será aplicado en el lagrimal del ojo enrojecido y en los contornos de nariz y boca.
Con toques de sombra negra, oscureceremos los golpes y otorgaremos profundidad a los ojos, aplicándola en la zona del lagrimal y obre las ojeras. Con labiales granate y berenjena marcaremos líneas de expresión en el entrecejo, los ojos y la boca
Repetiremos el paso anterior con un eyeliner negro y lo difuminaremos con la yema de los dedos. En las zonas enrojecidas (nariz, boca y ojo, tanto en el párpado móvil, como en la línea inferior de las pestañas) subiremos la intensidad de la coloración extendiendo labial de color rojo intenso. En el otro ojo haremos lo mismo con pintura para labios morada.
Delinearemos por dentro la raya inferior del ojo con un lápiz rojo y, por último, echaremos vaselina sobre los golpes y las zonas rojas de la nariz y la boca, consiguiendo una caracterización más real. El resultado será, sin duda, de lo más terrorífico.
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